¿Por qué hay tanta gente que parte de su vida la dedica a vivir en el pasado? ¿Por qué se encierran en su propio mundo de experiencias ya vividas? Una de las muchas respuestas que hay es el miedo al olvido. El olvido por alguien cercano a ti que murió, vives en su recuerdo y te pones aún más triste porque ya no esta. Eso habrá gente que no quiera aceptarlo pero es verdad, yo personalmente lo viví, pero un día una persona sabía me dijo que por no pensar en esa persona a todas horas te ibas a olvidar de ella. Es bueno de vez en cuando recordarlas, pero tu vida no puede girar en torno a eso.
También las personas tendemos a recordar todos los momentos que viviste con esa persona por la que un día estuviste dispuesta a hacer cualquier cosa. Piensas que ya te olvidaste de él, que lo único que le tienes es aprecio, pero cuando empiezas a salir con otros, acabas comparándolos Ahí te das cuenta de que aún le quieres, en ese instante vuelves a recordar todos los momentos con él, y no puedes pensar en otra cosa.
Acabas dedicando tu vida a encerrarte en las cosas que te recuerdan a ellos: las canciones, los lugares y las fotos que compartisteis juntos... Todas esas cosas que te hacen sentirte más cerca de esas personas y a la vez más triste porque no lo estas, pero, que al fin y al cabo, tan solo son recuerdos.
El mejor consejo que se les puede dar a todas esas personas es CARPE DIEM.
No hay comentarios:
Publicar un comentario